Tras la lectura del capítulo siete acerca de menores y redes sociales, llego a la conclusión de que es imprescindible educar y concienciar a los jóvenes acerca de la utilización de esta herramienta, los riesgos a los que nos exponemos, crear una visión crítica de este medio de comunicación, para llevar a cabo una buena utilización de ésta.
Pongo en duda la idea de que el género intervenga en este aspecto, puedo opinar que el género masculino se autoevalue como experto pero más por cuestiones psicológicas en las que las niñas son más propensas a opinar que para ser experto deben saber más.
En cuanto a la edad si opino que esta influye. puesto que cuánto más pequeño es el niños o la niña más idealizada tiene la realidad y por tanto menor es el riesgo que puede prever.
En definitiva opino, que tanto un género como otro deben ser educados de forma responsable, ayudándoles a descifrar los peligros con los que nos podemos encontrar.
Creo, además que es crucial a edades tempranas la intervención de los padres que, aunque limitando la intimidad , lleven a cabo una supervisión de sus hijos en relación con las redes sociales.
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